Los principales sistemas de almacenaje con estanterías son:
- Almacenamiento convencional
- Almacenamiento compacto o Drive
- Almacenamiento dinámico
- Almacenamiento móvil
ALMACENAMIENTO CONVENCIONAL
Consiste básicamente en estanterías con varios niveles separados en función de la propia medida de las cargas, sin profundidad, y que permiten el acceso directo a los productos almacenados en ellas a través de distintos pasillos, cuyo ancho estará determinado por el medio de manipulación empleado. En los niveles altos se colocan las paletas completas y en los bajos para la preparación de expediciones manual.
Existen dos modelos: De bandeja y de paletizacion(solo para palets)
Ventajas:
- Acceso directo a cada paleta
- Control rápido del producto
- No aprovecha el espacio, requiere muchos pasillos
- Volumen de mercancía almacenada limitado
ALMACENAMIENTO COMPACTO
La característica principal d este sistema es la inexistencia de pasillos entre las estanterías formando así un bloque, se consigue una ocupación de la superficie y del volumen del local excelente, es muy recomendado para productos de baja o media rotación así cada calle esta ocupada por una sola referencia,utiliza estanterías drivers:
Drive in:
Se puede acceder a los productos desde el frontal únicamente
LIFO
Drive through:
Se puede acceder a los productos tanto por la parte frontal como por la posterior.
FIFO
ALMACENAMIENTO DINÁMICO
Compuesto por túneles o alvéolos ligeramente inclinados y provistos de rodillos, la introducción de palets se hace por un extremo y se extraen por el otro, los dos extremos no están a la misma altura, así que hay que definir bien el grado de inclinación y un buen sistema de frenado de palets.
Aprovecha muy bien el espacio como el Drive muy recomendado para las mercancías perecederas o mercancías de gran rotación.
El inconveniente principal es la gran inversión, y ademas una vez instalado es muy difícil de modificar.
Las mercancías que entran tienen que ser homogéneas en peso. FIFO
ALMACENAMIENTO MÓVIL
Estanterías montadas sobre raíles, los cuales consiguen el desplazamiento de dichas estanterías y, en consecuencia, permiten abrir un pasillo para poder acceder a cualquier mercancía
Se pueden juntar para crear un bloque y separar si hacen falta mas pasillos y así tener acceso a la mercancía que se quiere en cualquier momento.
Existen dos tipos: Estanterías móviles manuales y estanterías mecanizadas, como su nombre indica la primera es manual(cargas livianas) y la segunda lleva motores electricos y van sincronizadas, recomendadas para almacenes de temperatura controlada y camaras frigorificas
OTROS SISTEMAS DE ALMACENAJE.
ALMACENAJE DE PIEZAS PEQUEÑAS.
Entendemos por almacenaje de
piezas pequeñas aquel que conlleva el almacenamiento de piezas de poco peso o
pequeña dimensión.
Cuando nos
encontramos con piezas pequeñas o mucha cantidad tenemos 2 problemas: que hay
un número muy elevado de unidades con una gran variedad de referencias por una
parte, y que hay que agilizar las salidas para conseguir un alto índice de
rotación.
Tenemos dos tipos de almacenaje
en piezas pequeñas: en que el operario se dirija al producto o en que sea el
producto el que se dirija al operario.
Sistemas “operario hacia el producto”.
Estos sistemas son los mas
clásicos de todos los existentes. Los productos utilizados se almacenan en
estanterías y se colocan de manera manual o mecanizada. Para la extracción de
la mercancía, el operario se desplaza hasta el lugar donde está almacenado el
artículo que necesita. La gran ventaja de este sistema es su bajo coste de
inversión y su principal inconveniente es su alto coste de manipulación.
El
almacenamiento cuando el operario se dirige hacia el producto se realiza en:
Estanterías de un solo nivel. Estanterías de poca capacidad de carga. Se
utilizan gavetas o cajones para el almacenamiento. Para facilitar el acceso a
las piezas, las estanterías no suelen ser muy altas. Se colocan dejando
pasillos de paso como con el almacenamiento convencional.
Estanterías de varios niveles o “almacenes entreplantas”. Están compuestas de dos o más almacenes de un
nivel, que se instalan unos encima de otros. Son una gran opción para un mejor
aprovechamiento del espacio y así lograr un mayor almacenamiento. Los medios
mecánicos sólo se pueden utilizar en la planta inferior. Para subir paletas
completas a las plantas superiores se suelen utilizar ascensores, montacargas o
carretillas elevadoras. Por lo tanto, las plantas superiores se destinarán a
productos de menor rotación.
Estanterías móviles.
Son estanterías de tamaño medio que han sido montadas sobre raíles que se
mueven de manera eléctrica o manual, dependiendo del paso de la carga. Ahorran
una gran cantidad de espacio al reducirse los pasillos a uno. La mercancía se
coloca y se extrae de manera manual. El tiempo empleado es menor debido a que
las distancias son menores que con las estanterías fijas.
Almacenes de
pasillo estrecho. El sistema de
almacenaje con mayor rentabilidad de cara a la utilización del suelo, la
capacidad de manipulación y el coste de mano de obra aunque tiene un alto coste
de inversión. Posee unos pasillos muy reducidos y el almacenamiento aprovecha
toda la altura del almacén. Los medios de almacenaje son mecánicos.
Sistemas “producto hacia el operario”
Mediante este sistema se gana en
tiempo debido a que los productos llegan al operario y no tiene que perder
tiempo en desplazarse hasta los mismos.
Estos sistemas poseen una
automatización casi total, los productos llegan al operario en la estación de
picking donde se encuentra para manipularlos.
Podemos realizarlo mediante:
Miniload o Microload.
Es un almacén compacto automático que usa un microtranselevador que mueve
bandejas adaptadas al tamaño de las piezas. Por este sistema las unidades de
carga, que están situadas en las estanterías, son manipuladas automáticamente
por el microtranselevador, que las acerca al puesto del operario para que éste
extraiga o deposite la mercancía, devolviéndola a su lugar a continuación. El
trabajador dirige el miniload con un pc pudiendo controlar varios.
Carrusel. Este
sistema se caracteriza por tener estantes móviles suspendidos de un carril
superior que se mueven articuladamente desde una unidad de tracción situada en
la parte inferior. Actúa como un almacén compacto, ha sido diseñado
especialmente para la preparación de pedidos de pequeñas piezas. La carga del
carrusel se hace de forma manual con cestones previamente cargados, que son
manejados con carretillas u otros medios de manipulación mecánica.
Paternoster..Es un sistema de almacenaje muy compacto donde
se gana mucho en espacio. El movimiento de los estantes que contienen las
mercancías en el interior del armario es sólo vertical, pudiendo formarse
grupos de varios paternosters controlados por un mismo operario, quien desde
una estación ergonómicamente correcta puede realizar otras funciones como la de
empaquetado o marcado de las mercancías. Están diseñados para piezas pequeñas
pero también pueden albergar piezas de mayor tamaño. Son perfectos para guardar
piezas de gran valor.
ALMACENAJE DE CARGAS LARGAS.
Las cargas
largas están formadas por piezas de gran longitud unidas mediante flejes para
ser solo una. Al ser pesadas utilizaremos:
Almacenaje directo. Se colocan las cargas en
el suelo sobre unos tacos para poder introducir y sacar las horquillas de las
carretillas elevadoras. Con este sistema se pueden almacenar mercancías que
permiten ser apiladas unas sobre otras.
Almacenaje en estanterías. Empleada
en cargas muy flexibles, como pueden ser tubos, o de alto valor, se almacenan
en el interior del almacén sobre una instalación más rígida que impide que se
doblen o deformen. Las mejores estanterías para albergar cargas largas son las estanterías
en cantilever, formadas por una estructura central resistente sobre la que se
fijan fuertemente unas ménsulas o brazos en los que se deposita la mercancía.
5.3. ALMACENAJE DE CARGAS VOLUMINOSAS.
Son aquellas que necesitan de medios mecánicos
especiales para su manipulación y almacenaje. El volumen y el peso son factores
que influyen directamente, pero las agruparemos por la forma para estudiar
mejor las técnicas de manipulación que se aplican en la práctica. Según este
criterio las mercancías voluminosas se dividen en:
- Mercancías
laminares. (De chapa, plástico, vidrio float y
amianto)
El factor principal: Grado de flexibilidad que depende
de las dimensiones y del grosor, cuanto mayor son las dimensiones de la lámina
mayor es la flexión, pero a mayor grosor la flexión es menor. Las láminas de
pequeñas dimensiones se manejan y almacenan formando una unidad de carga sólida
sobre una paleta o plataforma de madera debidamente flejada y prácticamente
indeformable y las láminas grandes se pueden almacenar, según los casos,
directamente en el suelo colocando apoyos entre unidades de carga para
introducir las horquillas, sobre bandejas de madera con las mismas prevenciones
que el caso anterior, en estanterías en cantilever sobre plataformas que se
colocarán en las ménsulas para evitar el efecto flector... La manipulación por
medios mecánicos se realiza con carretillas elevadoras, intentando evitar la flexión
permanente acortando la distancia entre los apoyos de los equipos de elevación
utilizando mayor número de horquillas o manejando la carga sobre una
plataforma.
- Mercancías
tubulares. Este tipo de mercancías, cuando es de pequeñas dimensiones se
pueden manejar y almacenar como las cargas largas, pero si son de medio o gran
calibre hay que atender a los siguientes tipos:
·
Tubos rígidos
metálicos. Se agrupan en función del calibre y se colocan sobre
unas camas de madera, se fleja fuerte la unidad de carga y se maneja con
carretillas elevadoras. El almacenamiento se realiza siempre en el exterior y,
dada su inestabilidad, a una altura máxima de dos. Cuando se trata de tubos
grandes se almacenan directamente en el suelo y en pirámide, de modo que dos
tubos sirvan de soporte a uno.
·
Tubos rígidos de
hormigón. Se manejan normalmente con carretillas elevadoras
dotadas de espolones o ganchos para tubos de calibre mediano, y de horquillas
convencionales cuando se trata de tubos de grandes dimensiones o mucho peso. El
almacenamiento, que se realiza en el exterior, es muy similar al de los tubos
metálicos, con la única diferencia de que, al ser mayor la fragilidad, el
número de alturas tiene que estar limitado a la resistencia de las cargas que
actúan de soporte, no pudiendo apilarse, por ejemplo, los tubos grandes.
·
Tubos semirrígidos de
plástico duro. Se manejan por unidades que
carga que se forman en jaulas. El peso de este material es relativamente
pequeño y el factor más importante a considerar es el gran volumen de las
jaulas, siendo su manejo relativamente sencillo con carretillas de carga
lateral. El almacenaje también es muy sencillo, realizándose de forma que las
propias jaulas actúan de soporte unas de otros, por lo que se pueden alcanzar
grandes alturas de apilado. Normalmente se almacenan en el exterior, aunque hay
fabricantes que lo hacen en locales cubiertos.
- Mercancías
cilíndricas. Son aquéllas que para su manejo se enrollan en forma de
bobina, bien directamente o en una estructura metálica o de madera. Los tipos
que se van a estudiar son:
·
Bobinas de papel y
cartón. Se manejan con carretillas elevadoras provistas de
pinzas especiales de apriete y giratorias, mientras que su almacenaje se
realiza exclusivamente en el interior del almacén apilándose de forma directa,
es decir, unas sobre otras verticalmente sin prácticamente ninguna limitación,
ya que el papel cuando se bobina de forma compacta posee alta resistencia.
·
Bobinas de chapa. Se pueden manejar directamente con máquinas
elevadoras equipadas con un espolón que se introduce por el agujero central del
enrollamiento, o sobre paleta utilizando carretillas elevadoras provistas de
horquillas convencionales. El mayor problema al manejar las bobinas de chapa reside
en el peso, pues las grandes oscilan entre las 20 y 30 toneladas, almacenándose
éstas más grandes y pesadas en el exterior directamente sobre el suelo y de
forma piramidal. Por el contrario, las bobinas más ligeras, que también se
pueden almacenar en el exterior, se colocan en estanterías especiales.
·
Bobinas de cable. Pueden ser de dos tipos: cables de acero, que se
enrollan de forma cilíndrica formando una bobina como unidad de carga,
manejándose con grúas o con carretillas y almacenándose en el exterior
generalmente; o cables eléctricos y telefónicos, que se enrollan en grandes
bobinas de madera o metálicas, desprovistas estas últimas de agujero central,
por lo que su agarre debe realizarse mediante grúas o introduciendo eslingas en
la estructura de la bobina.
5.4. ALMACENES AUTOPORTANTES.
El almacén
autoportante constituye una estructura compacta en la que primero se instala la
infraestructura física de estanterías y posteriormente, mediante paneles
especiales, se instalan las paredes del almacén que lo alberga, con lo cual el
coste de construcción se reduce con relación al sistema convencional de
construcción de naves industriales. Es cierto que la instalación física del
sistema de almacenamiento es muy costosa debido a la alta tecnología empleada,
pero por otro lado supone una drástica reducción de mano de obra, siendo
frecuente encontrar almacenes que se manipulan en su totalidad por equipos de
tres o cuatro personas.
Las dimensiones de un almacén autoportante se establecen
analizando los parámetros que influyen en cada caso concreto: unidad de carga
(tipos, medidas y pesos), referencias (número y cantidad de unidades), flujo de
entradas y salidas, crecimiento previsible en un plazo de tiempo determinado,
zonas anexas (recepción, expedición, muelles de carga, etc.), y servicios
complementarios (accesos, iluminación, sistemas contra incendios, etc.). No
obstante, hay que destacar que la altura suele oscilar entre los 20 y 60
metros, consiguiéndose una máxima utilización del volumen disponible teniendo
en cuenta que los pasillos diseñados tienen una anchura del orden de 1,20
metros.
Para conseguir la máxima capacidad, la colocación de
mercancía se realiza bajo el principio “hueco vacío”, que se basa en que cuando
entra una paleta se le asigna el primer hueco vacío del pasillo donde esté en
ese momento trabajando el robot o equipo de elevación, memorizando el ordenador
la estantería y posición para después acceder a ella según los criterios de
extracción (FIFO o LIFO) establecidos en el almacén. Los movimientos físicos de
las mercancías en el almacén se realizan de forma automática, siendo los medios
más utilizados para ello los transelevadores y los transportadores.
Ventajas:
- Posibilidad
de gestión automática del almacén desde un ordenador, lo que reduce los errores
y accidentes en el almacén.
- Se
reduce de forma importante el tiempo de manipulación de las mercancías.
- Facilita
futuras ampliaciones y se evitan pérdidas de espacio, puesto que el almacén se
proyecta para ajustarse a los medios necesarios.
- Posibilidad
de aplicar diferentes grados de automatización para obtener el máximo
rendimiento.
Por el contrario, este sistema presenta como
principales inconvenientes los siguientes:
- Las
paletas deben estar perfectamente estandarizadas en cuanto a peso y
dimensiones, y además la carga perfectamente dispuesta, pasándose al efecto un
control de gálibo exhaustivo en la entrada con el fin de que la automatización
del sistema no suponga ningún problema al respecto.
- Aparte
de la importante inversión en la maquinaria utilizada en el sistema de
almacenaje y los medios de manutención, el coste de mantenimiento de dicha
maquinaria resulta igualmente muy costoso, por lo que el sistema se justifica
solamente cuando se vaya a utilizar a largo plazo.
5.5. ALMACENAJE DE CONTENEDORES.
Actualmente el
contenedor es la unidad de carga que utilizan tanto las empresas que exportan
sus productos como las que dependen de la importación e, incluso, aquéllas que
utilizan algún tipo de transporte multimodal. El uso de contenedores está tan
extendido que se forman almacenes bajo la estructura de los mismos, es decir,
se utilizan los contenedores apilados para hacer las funciones del edificio en
sí. Sin embargo, el almacenaje de contenedores propiamente dicho se produce en
tres puntos muy concretos, que son: terminales marítimas de contenedores,
terminales ferroviarias de contenedores y depots o
almacenes de contenedores.
Los sistemas de almacenamiento de contenedores pueden
ser:
- Almacenamiento
en fila única. Consiste en colocar los contenedores perfectamente alineados
dejando entre ellos el pasillo necesario para las ruedas de los van carriers. La ventaja principal de este sistema es
que se consigue un excelente aprovechamiento del espacio, ya que las calles o
pasillos son muy estrechos. Sin embargo, cuando las filas son demasiado largas
o altas se requieren grandes trabajos de extracción para sacar un determinado
contenedor, por lo cual en la práctica se realizan filas cortas, entre 15 y 20
contenedores por fila y dos en altura.
- Almacenamiento
en doble fila. Los contenedores se apilan en filas dobles dejando un
pasillo de maniobra a cada lado, con el fin de poder extraerlos y posicionarlos
por ambos laterales, para lo cual se utilizan carretillas elevadoras spreader. Este sistema presenta como ventaja su buena
accesibilidad, ya que para tomar cualquier contenedor sólo habrá que desmontar
los que hay encima de él. Además, los pasillos que se utilizan son grandes y
permiten realizar la carga/descarga de los camiones dentro de los mismos, sin
necesidad de tener que habilitar otra zona. Entre los principales
inconvenientes hay que indicar que con carretillas de carga frontal se
necesitan pasillos de maniobra de 12 a 15 metros, y con las de carga lateral la
maniobra es muy lenta además de que la altura de apilado difícilmente supera
dos contenedores.
- Almacenamiento
en bloques de triple fila. Consiste en formar bloques de contenedores de
tres profundidades y varias alturas desde un pasillo bastante ancho, incluso
superior al que necesitan las carretillas de carga frontal. Este tipo de
almacenamiento sólo se puede conseguir con grúas apiladoras de contenedores (reach stackers). La gran ventaja de este sistema es la
facultad que tiene la grúa de poder llegar a la tercera fila y la posibilidad
de alcanzar fácilmente cinco alturas de contenedores, aunque solamente sea en
la primera fila. Otra ventaja añadida es que se reducen los pasillos de
circulación, gracias a la facultad de giro que tiene el spreader de estas máquinas.
- Almacenamiento
en bloque compacto. Consiste en colocar todos los contenedores agrupados y
adosados unos junto a otros sin dejar espacios intermedios. El apilamiento se
puede realizar con casi todos los equipos de manutención con la única excepción
de los van carriers. La principal ventaja de este sistema es
que el aprovechamiento del espacio es excelente resultando muy interesante para
el almacenaje de contenedores vacíos, y aún más si se le añade la posibilidad
de apilar a cuatro, cinco e incluso seis alturas. El único inconveniente es la
falta de accesibilidad a un contenedor determinado, por lo que debe utilizarse
cuando se prevea que no se va a necesitar tal operación.